La Historia de Ucha - Parte II-

 Un tiempo después y aquí estoy, contándoles lo que fue las segunda parte de la historia de Ucha.

No podía creer tener un espacio dedicado exclusivamente a mi marca, pero finalmente había llegado.

 Con lo ganado en la Feria Puro Diseño, compré algunos muebles que ayudaran a representar visualmente la identidad de Ucha y así fue que estaba listo el Showroom. 

Claro que no como lo conocen hoy, sus paredes eran blancas y tenía otra distribución, en verdad pasamos por muchos cambios hasta dar con los muebles tal y como los conocen hoy. 

Los primeros años en el showroom recibía visitas en su mayoría de clientes mayoristas. 

Abríamos tres días en horario fijo para esperar a las clientas, había días en los que nadie venía. 

Ucha era muy nueva en el rubro y sabía que iba a llevar un tiempo hasta darla a conocer, aún así, cada día preparaba el showroom con su aroma característico y todo en perfecto orden. 

Fueron años de mucho trabajo, a la par que trabajaba para que Ucha creciera, estudiaba en la facultad. 

Pero todo cambió el día en que me recibí, Diciembre 2016, pude abocarme 100% a Ucha. 

Al año siguiente, una amiga muy querida, Pili, vino a trabajar por un período de 10 meses a Ucha mientras hacía una especialización en Moda. Con ella sentamos las bases administrativas y organizativas, y significó un antes y un después. Dejamos todo listo para el despegue.

Decidí apostar y diseñar exclusivamente para Ucha, destinarle todos los materiales que encontraba y dar toda mi atención para cada colección.

Con el paso del tiempo empezaron a visitarnos amigos de los amigos de aquellos primeros amigos que consumían la marca, a los cuales ya no conocía. 

El showroom pasó a estar abierto de lunes a sábados en horario fijo y sumamos a una más al equipo de diseño y atención al público. 

Empezamos a celebrar cada lanzamiento de colección dando fiestas en nuestro showroom, cambiamos los colores de sus paredes y armamos una oficina.

Aquel sueño que tuve hace siete años, hoy se convirtió en realidad, y yo lo llamo #uchaworld, un mundo construido tal y como lo imaginé.

¡Gracias a ustedes y a tod@s los que trabajan en Ucha y hacen posible que sigamos soñando despiertas!

El showroom hoy